
Hace un mes que Sebastián Pérez, primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Granada, dimitió como presidente del PP y este miércoles ha ofrecido su primera comparecencia para mostrar sus sensaciones de lo que fue una auténtica crisis en el seno del consistorio granadino tras un pacto en la alcaldía que no compartió en ningún momento benefició a la ciudad, según ha indicado.
Ha querido dejar clara su posición con respecto al alcalde Luis Salvador y también a la situación generada, no arrepintiéndose en ningún momento de lo que dijo: «Soy una persona seria y consecuente con lo que digo, por lo que me avala mi trayectoria, y pese a lo que piensen, la decisión estaba tomada desde hacía meses pero no podía por las elecciones generales y las que después vinieron ese año», ha dicho, ratificando con firmeza sus argumentos anteriores.
Pérez sabe que su partido tendrá que tomar una decisión al respecto y admite estar a la espera de la decisión final y su papel en el área de Contratación. «No sé qué pasara», ha dicho.
No ha valorado de lleno el desmentido a sus palabras hechos en su momento por el portavoz del grupo y admite tener una relación «normal» con el alcalde de la ciudad. Aunque «siempre ha habido un mantra Sobre las relaciones con su grupo municipal tras el desmentido de sus acusaciones realizado por el portavoz del grupo y la que mantiene con el alcalde, ha dicho que son «normales». «Las relaciones son normales y respetuosas» aunque no se van «de copas» juntos.